La Unión Balompédica Conquense visitaba el San Marcos de Quintanar del Rey para cerrar el año 2019. Lo hacía cerrando la última jornada del año y con la única intención de reencontrarse con la victoria. Los de Nacho Alfonso que fueron superiores en cuanto a ocasiones se fueron con derrota tras un penalti muy dudoso.

Alfonso salía de inicio con Isi Jareño bajo palos, dos carrileros; Gerica por izquierda y Álvaro por la derecha, con una línea de tres centrales formadas por Sahuquillo, Héctor Rubio y Pacheco; en el centro del campo Iván Rubio. José Vega y Zequi como interior escoltando a Miguel Chaves y a Canty en punta de ataque.

De este modo el partido comenzó desde los primeros minutos con una presión balompédica fabulosa, apretando arriba y generando peligro sobre la meta verdiblanca que tuvo que resistir un disparo de Chaves que terminó anulado por fuera de juego, dos de Gerica, otro de Zequi que se marchó por encima de la meta.

El partido se encontraba de cara para una Balompédica que no había concedido ni una sola ocasión y que vería como en el minuto 24 una contra local terminaría con un penalti señalado de Iván Rubio que parecía más que dudoso. Álvaro Collado en el 25 lo transformaría, logrando el 1-0. Tras la pena máxima Gerica tendría en sus botas el empate, con una falta que mandaría al travesaño.

Segunda parte

Tras esto el partido entraría en una ida y vuelta sin ocasiones que llevaría la desventaja al descanso. En la segunda mitad el Conquense saldría con fuerza, buscando el empate en un primer tramo que de nuevo los locales volvieron a solventar. Canty y sobre todo Zequi que en el punto de penalti desperdició la más clara del partido terminaron llevando el partido a un punto de imprecisiones en el juego provocado por los nervios y las precipitaciones con el resultado en contra y el cronómetro corriendo.

El balón parado sería el arma más poderosa de la Balompédica en un tramo final donde tuvo que asumir más riesgos y dejar espacios que el Quintanar pudo usar para ampliar la diferencia, aun que sin demasiada suerte. Así se llegaría al pitido final que consumaba la cuarta derrota consecutiva del Conquense y con el que se cierra el tramo año 2019.